Comience el día con un delicioso desayuno preparado por los lugareños, que le hará saborear los sabores auténticos. Acompañando a su desayuno está el tradicional té matutino infusionado con refrescantes hojas de menta, una forma perfecta de cargarse de energía para el día que nos espera.
Nuestro viaje continúa hacia el encantador oasis de Farafra. En Farafra, tendrá la oportunidad de disfrutar del relajante manantial de agua caliente sulfurosa de Bir Setah, también conocido como Pozo Setah. Sumérjase en sus relajantes aguas y disfrute de los beneficios terapéuticos de este oasis natural. Además, visitará el singular museo de ladrillos de barro del artista local Badr, donde podrá admirar las creaciones artísticas inspiradas en el entorno circundante.
A continuación, exploraremos el casco antiguo de Al Qasr, de gran importancia histórica. Desde allí, nos dirigiremos de Farafra a Dakhla, aproximadamente a 3 horas en coche. Nuestra primera parada en Dajla será el templo romano de Deir el-Hagar. Este templo, que data de la dinastía XXVI, se alza en medio del desierto y está parcialmente enterrado por dunas de arena. Maravíllese ante la grandeza arquitectónica lograda por los legendarios emperadores romanos. Continuando nuestra exploración, visitaremos el cementerio romano de El Muzawwaqqa, donde podrá admirar algunas de las tumbas excavadas en la roca más bellas de Egipto.
Después de un satisfactorio almuerzo, visitaremos la antigua aldea islámica de Al Qasr, que data del siglo XII d.C. Explore las antiguas casas, las fascinantes callejuelas y los lugares históricos suc